Oracle, siendo una plataforma de software empresarial tan versátil, puede parecer compleja al inicio. Sin embargo, sus fundamentos se basan en conceptos claros.
Los primeros pasos suelen involucrar la instalación de la base de datos Oracle, la creación de usuarios y esquemas, y la definición de tablas para almacenar los datos. Una vez configurada la base de datos, se utiliza el lenguaje SQL (Structured Query Language) para interactuar con ella: realizar consultas, insertar, actualizar y eliminar datos.
El funcionamiento se centra en el almacenamiento eficiente de grandes cantidades de información, permitiendo a las empresas gestionar y analizar sus datos de manera efectiva. Oracle ofrece herramientas gráficas y de línea de comandos para facilitar estas tareas, así como una amplia gama de funciones avanzadas como la optimización de consultas, la seguridad de los datos y la alta disponibilidad.